¿Por qué no se llevan a los sobrevivientes del Holocausto a las escuelas árabes, donde podría ser – realmente – importante? Porque se tiene temor

"Los sobrevivientes del Holocausto son no solo testigos de su época sino constituyen también  un vínculo viviente entre el pasado y el presente. A través de sus testimonios, nosotros podemos abrir las puertas de una parte de la historia. 

El Holocausto no fue un suceso único. Este fenómeno es parte de un proceso histórico y político de exterminio y violencia, con antecedentes bastante antiguos. Por citar alguno de ellos, recordemos a los griegos o a los romanos. También a los españoles en América o a los ingleses, belgas, franceses y alemanes en África.

Para dialogar sobre estos temas y otros, como el denominado "Cultura del recuerdo"( Erinnerungs-kultur) en Alemania ( significativo proceso que trata de mantener vivo el recuerdo de los horrores del Holocausto, para aprender de él, afín de que la historia no se repita) hemos invitado a dos sobrevivientes judíos del Holocausto. 

Nuestros entrevistados son: Michal Salomonovic, de 82 años y Hanus Hron, de 90 años, ambos  de nacionalidad checa y actuales residentes en su país natal.

El primero, sobreviviente del campo de concentración Auschwitz-Birkenau y del geto Lodz, entre otros. H. Hron, preso en Theresienstadt y en Wulkow-Alemania, centro de trabajos forzados.

Piensa Ud. que en Alemania la llamada "Cultura del recuerdo" cambiaría, cuando ya no existan más sobrevivientes del Holocausto?

Salomonovic: Es claro que la "Cultura del recuerdo" cambiará cuando no hayan más sobrevivientes del Holocausto. Hay varias posibilidades: por ejemplo, literatura sobre el tema, documentación, videos u otros medios de comunicación a los cuales se puede recurrir. El contacto directo con los testigos, a los cuales se podrían preguntar y obtener respuestas, obviamente, es irreemplazable.

Hron: Los recuerdos y la "Cultura del recuerdo" cambian continuamente, no sólo en Alemania sino también en todas partes, existan o no sobrevivientes del Holocausto. Pensar que un par de centenares de ancianos (los sobrevivientes del Holocausto) podrían influir sobre la mayoría, es risible por no decir ridículo.

La lucha contra el olvido es muy importante para mantener vivo el recuerdo del Holocausto. En este aspecto, ¿qué rol juega la política?. Opina usted que se han señalado las pautas apropiadas?

Salomonovic: La política juega ,en este campo, un papel importante apoyando muchos proyectos vinculados a la cultura del recuerdo. Un ejemplo concreto es la financiación de varios de esos proyectos. Yo pienso que la República Federal de Alemania realiza, en este aspecto, un buen trabajo.

Hron: Siempre han habido matanzas masivas, tanto antes del Holocausto (por ejemplo, el genocidio de un millón y medio de armenios en Turquía), como después (la matanza de tres millones de camboyanos por parte del Khmer rojo). 

Respecto al Holocausto, yo  puedo entender  los remordimientos de conciencia de los alemanes, pero considero que un genocidio de los judíos no se volverá a repetir. La población judía está esparcida en el mundo. Actualmente, por ejemplo, en Europa occidental no hay un número considerable de judíos. Evidentemente, en el futuro se producirán atentados (como en Francia), pero éstos serán casos aislados.   

   

¿Y qué puede decir usted sobre el papel que ha tenido la Iglesia sobre este tema?

Salomonovic: La Iglesia tiene también un rol decisivo debido, sobretodo, a que las religiones cristianas trabajan más estrechamente y han tomado una posición clara y determinante contra  toda discriminación, racismo y antisemitismo.

Hron: La Iglesia ha tenido siempre una mínima influencia sobre la población. Sobre lo que sucedió durante el régimen nazi, el clero católico observó todo silenciosamente pero complacido. Yo me pregunto, ¿qué importancia tiene todavía todo esto hoy día?

La juventud actual en Alemania no ha sufrido persecución y terror. ¿Cómo se puede lograr  que esa juventud tenga mayor interés por el tema del Holocausto?

Salomonovic: Los maestros en las escuelas podrían hacer el intento de hacer despertar el interés a los jóvenes sobre el tema. Otra posibilidad sería la visita a museos o ex- campos de concentración, como el de Auschwitz-Birkenau, Dachau o Flossenbürg.

Hron: Todas estas preocupaciones son superfluas, a mi modo de ver. Son las preocupaciones de  la alta generación, para poder sentirse importante. Para la juventud, son preocupaciones que no la afectan. 

Desde hace un buen tiempo Ud. mismo se ha impuesto como tarea de toda una vida mantener vivo el recuerdo del Holocausto. Qué lo ha impulsado para tomar esa decisión?. ¿Por qué es tan importante mantener el recuerdo de la barbarie nazi?

Salomonovic: Sí, es muy importante para que la historia no se repita.

Hron: Esta pregunta es un error, por donde se la vea. Lo importante es el futuro. La organización de conferencias de los testigos del Holocausto en las escuelas son, en el fondo, remordimientos de conciencia.

 Para la tercera o cuarta generación de alemanes de la posguerra, qué utilidad tienen  las palabras y más palabras. ¿Por qué no se llevan a los sobrevivientes del Holocausto a las escuelas árabes, donde podría ser – realmente – importante? Porque se tiene temor.

En relación al Holocausto, ¿qué mensaje tendría Ud. para la juventud de hoy día y para las generaciones futuras?

Salomonovic: Un mensaje para la gente joven y que lo tomo como el mío propio, es un documento suscrito el 25 de enero del 2009 en Berlín  por  sobrevivientes  de  diferentes  antiguos  campos  de concentración. 

Entre otros, aparecen como firmantes Noach Flug (Jerusalén), Jack Terry (New York), Albert van Hoey (Bruselas), Max Mannheimer (Münich). De ese documento cito un fragmento que podría ser un mensaje adecuado para el caso: "Los últimos testigos oculares (del Holocausto) se dirigen a Alemania, a todos los países europeos y a la comunidad  internacional para que el don humano del recuerdo y de la conmemoración se dignifiquen y  protejan  también  en  el futuro. 

Nosotros pedimos a la juventud que continúen nuestra lucha contra la ideología nazi para lograr un mundo justo, lleno de paz y de tolerancia, en donde el antisemitismo, el racismo, la xenofobia y el extremismo de derecha  no tengan lugar"

Hron: Vivir y dejar vivir.

En la actualidad, se pueden reconocer en Alemania algunas tendencias y opiniones diversas sobre la conmemoración del Holocausto. Por un lado,  se insinúa que el continuo recuerdo del Holocausto reflejado en la celebración de aniversarios, visitas de ex campos de concentración y homenajes diversos podría conducir a un hastío de la opinión pública. Por otro lado, en caso de desistir de esa "Cultura del recuerdo",  que a veces se ve como un símbolo de profunda compasión, se presume que podrían surgir nuevas tendencias de sustitución. ¿Qué opinión tiene Ud. sobre el particular? 

Salomonovic: Yo encuentro que en Alemania hay un equilibrio entre las dos tendencias. Se intenta, sin exagerar, de mantener viviente el recuerdo o la memoria del Holocausto pero tampoco se oculta o se olvida el pasado.

Hron: Yo estoy convencido que los alemanes han hecho todo lo posible, como resarcimiento y reparación por las atrocidades de los nazis. Tanto desde el aspecto moral, como del material. Nadie puede hacer revivir a los muertos!

 Entonces, digo yo ¿qué buscan los moralistas y qué quieren los judíos? De esas interminables advertencias y admoniciones podría originarse un antisemitismo.

Baesweiler, mayo del 2015"                

(La entrevista fue realizada en alemán por Jorge Trigoso Pérez, antropólogo peruano con más de 30 años de residencia en Alemania. Ha sido traducido por el mismo entrevistador. Michal Salomonovic, de 82 años y Hanus Hron, de 90 años, ambos de nacionalidad checa, son supervivientes de los campos de exterminio nazis)