15/7/08

Reconciliación con la propia historia

“Le obsesiona (nota: a Ute Lemper) el silencio de los alemanes sobre lo que ocurrió en la Alemania nazi: "Pienso en ello todo el tiempo. No les hables de la guerra. Incluso los jóvenes están paralizados. Detesto que la vieja generación quiera hablar de su propio sufrimiento, y si sacas el asunto de la ejecución organizada de seis millones de seres humanos, ya no quieran hablar. Les ha tomado 55 años erigir un Memorial del Holocausto en Berlín. Yo hubiera querido cuando era joven que alguien me dijera 'esto es lo que ocurrió' y poder llorar". (El País, ed. Galicia, Cultura, 12/07/2008, p. 39)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay una frase de la filósofa judía, Hannah Arendt que hizo que surgieran ampollas en la conciencia humana:"Eichmann en cada uno de nosotros". Tal vez ésta sea una de las razones porque esa generación que pasó la época nazi, no quiera escuchar, hablar ni saber... Todos sin excepción podemos ser Eichmann. Es decir, pasar de hombres y mujeres normales, padres y madres de familia a ser un criminal entregado a la "causa".

Saint Just dijo...

discrepo, amistosamente, de la apreciciacion de Ana respecto a la valoración de la frase: es una reflexion filosofica al margen de la profesión de fé de la pensadora. Todavia no he atisbado en Walter Benjamim ninguna referencia a su condición de judio en su estudio critico del arte.