17/4/13

“Yo asesiné a Santiago Brouard”

"El atentado contra Santiago Brouard, pediatra y ex dirigente de Herri Batasuna (HB), se llevó a cabo en Bilbao (Vizcaya) el 20 de noviembre de 1984, sobre las 18:20 horas, y fue reivindicado por los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL). Casi 30 años después, Luis Morcillo ha confesado ser el autor material del asesinato de uno de los referentes del mundo aberzale.

Según Más Investigación y ha recogido este lunes El Mundo, Morcillo, de 73 años de edad, que vive apartado de toda actividad pública, ha confirmado al periodista Antonio Rubio que él fue, junto a Rafael Masa, ex comandante de la Guardia Civil y mano derecha de Julián Sancristóbal, director de Seguridad del Estado, quien asesinó a Brouard.

“Ante todo quiero pedirle perdón a la familia de Santiago Brouard. Estoy totalmente arrepentido”. Morcillo pide perdón antes de su confesión: “Yo fui el ejecutor, pero se me mandó hacerlo, me obligaron, me forzaron, fue Rafael Masa, mi compadre”. El asesinato de Brouard, como el de Juan Carlos García Goena (Hendaya, 24 julio de 1987), fueron reivindicados por los GAL, durante el periodo de Gobierno del PSOE bajo mandato de Felipe González.
 
La novedad de estos dos asesinatos es que, hasta ahora, no habían sido esclarecidos, no se conocía el autor material. “Yo tenía mucha amistad con mi compadre, Rafael Masa, y me forzó en varias ocasiones a hacerlo con Rafael López Ocaña [condenado en 1993 a 33 años por el asesinato de Brouard] y compañía. [...] Masa me dijo que si no lo hacíamos su jefe lo echaba. Su jefe, seguramente, era Julián Sancristóbal, que era con quien trabajaba en el Ministerio del Interior”, ha reconocido el asesino confeso Morcillo.

El atentado contra el ex dirigente de HB se llevó a cabo nueve meses después de que los Comandos Autónomos Anticapitalistas, una escisión de ETA, asesinaran al senador del PSOE Enrique Casas en San Sebastián (Guipúzcoa). En este contexto, cabría pensar que el asesinato de Brouard entraría en la estrategia del ojo por ojo, diente por diente nunca resuelto.

Para Morcillo, apretar el gatillo tuvo su recompensa. “Me dieron 7,5 millones de pesetas y de esa cantidad tuve que darle 2,5 millones a Rafael López Ocaña. Es decir, que me quedaron cinco millones”, ha confesado a Más Investigación. Pero según el asesino, se produjo una estafa interna y alguien del Ministerio se quedó con una parte importante del dinero que estaba destinado para sufragar el atentado: “Después me enteré de que se libraron 25 millones de pesetas para el tema de Brouard, pero yo sólo me llevé cinco”.

 La confesión de Morcillo se produce después de que en el año 2003 la Audiencia Provincial de Vizcaya juzgara a José Amedo, Masa y a él mismo. Entonces, la fiscalía solicitó 25 años de cárcel para cada uno de ellos. Los tres fueron absueltos por falta de pruebas. Cinco años después del asesinato de Brouard, en marzo de 1989, la Guardia Civil detuvo en Alpedrete (Madrid), a López Ocaña, compañero de Morcillo en el atentado.

Tras esta detención, Morcillo se fugó de España para evitar ser detenido. “Masa me dijo que nos íbamos ya, hacia Lisboa y que le habían dado 18.000 dólares para el viaje”, ha recordado. En el aeropuerto de la capital de Portugal, Morcillo tuvo que afrontar, con los 18.000 dólares que le habían facilitado vía Ministerio del Interior, el pago de su billete y el de su compadre, que lo acompañó hasta Venezuela para que no tuviera problemas en su recorrido desde Madrid hasta el país sudamericano.

Tras una estancia de un mes en Venezuela, Morcillo se desplazó hasta Colombia por indicación de su protector. Y allí, el asesino de Brouard se puso en contacto, por indicación de Masa, con uno de los abogados del jefe del cártel de Cali, el narcotraficante Rodríguez Orejuela: “Se llamaba García de apellido, me ayudó y me dio protección. Más tarde me colocaron en su aparato de seguridad y trabajé para ellos”. Morcillo cobraba a los morosos de la droga que servían al cártel.

 En 1996, volvió a España, y siguió dedicándose a temas relacionados con el narcotráfico. En 1997 fue detenido con un alijo de 100.000 pastillas de éxtasis. En marzo de 1999 también fueron detenidos el ex policía Amedo, Masa, que ya había ascendido a teniente coronel de la Guardia Civil, y Sancristóbal.

Tanto Morcillo como Masa no podrán volver a ser juzgados nuevamente por el asesinato de Brouard, según el derecho fundamental non bis in idem recogido en la Constitución. Ese precepto establece que una misma persona no puede ser juzgada dos veces por un mismo hecho. Es decir, Morcillo no pisará la cárcel pese a ser asesino confeso."     (lavozdebarcelona.com, 15/04/2013)

No hay comentarios: